ALIMENTACIÓN Y CELULITIS
Comienza la época estival y con ello comenzamos a preocuparnos por la temible celulitis.
La celulitis es una enfermedad del tejido subcutáneo de la piel que afecta a mujeres. Se forma por deficiencias en la circulación, problemas hormonales, por llevar una vida sedentaria sin la práctica de ningún ejercicio físico y tiene gran condicionante genético.
Para prevenir y combatir su aparición lo fundamental es mantener una alimentación equilibrada, beber 1.5 – 2 litros de agua diarios y la práctica regular de ejercicio físico, con esto ayudaremos al organismo a eliminar toxinas y evitar su acumulación en la piel.
El consumo de agua además de favorecer la eliminación de esas toxinas, mejora la circulación sanguínea a nivel de epidermis y evitar la retención de líquidos que es el problema fundamental.
Cambios beneficiosos en la alimentación para prevenir la celulitis:
- El consumo excesivo de grasas y carbohidratos produce un aumento de secreción de insulina y esto puede ocasionar un aumento de la formación de grasa (lipogénesis).
- El exceso de sal produce retención de líquidos, evitar alimentos procesados y conservas.
- Consumir alimentos que nos ayuden a estimular el sistema linfático y así drenar mejor esa grasa que se acumula: las coles de Bruselas, zanahorias, patata y cítricos como la piña, fresa, pomelo que son ricos en vitamina C que nos ayudan a mejorar los vasos sanguíneos y controlar los edemas venosos.
- La escasa ingesta de fibra (alimentos integrales, fruta, verdura, legumbres...) produce estreñimiento y aumenta la resistencia venosa en los miembros inferiores, lo que favorece la inflamación y disminuye el retorno venoso, favoreciendo la aparición de celulitis. Aumentar el consumo de alimentos que eviten el estreñimiento para evitar que se acumulen las toxinas en los tejidos. Por tanto, es fundamental el consumo de fibra.
- Alimentos que mantengan el hígado limpio ya que es el filtro del organismo y esto ayuda a mejorar la eliminación de las toxinas de la dieta. Alcachofa, manzana, remolacha, ajo, cebolla…
- El consumo de proteínas debe ser suficiente.
- Los azúcares refinados (bollería, pasta, arroz muy cocido...) deben reducirse y consumirlos con mucha moderación y siempre antes de la tarde.
- Las grasas deben ser vegetales (aceite de oliva sobre todo), limitando al máximo las de origen animal.
El ejercicio físico juega un papel fundamental en la prevención y reducción de la celulitis, si caemos en el sedentarismo y no realizamos ejercicio disminuye la circulación sanguínea y se acumulan toxinas y líquidos en nuestro organismo.
Si conseguimos cambiar nuestra alimentación y la realización de ejercicio comenzaremos a observar como mejora el aspecto de nuestra piel.
Rocío Sánchez Romero
Técnico en Dietética y Estética